viernes, 12 de noviembre de 2010

Sahara Occidental: un conflicto olvidado

La represión desmedida con la que Marruecos ha arrasado el campamento de protesta que los saharauis había levantado a las afueras de El Aaiún, ha traído de nuevo a la actualidad el conflicto que se vive desde 1975 en el Sahara Occidental, la antigua colonia (y después provincia) española.





Este es un conflicto con muchas similitudes a otro completamente olvidado por la opinión pública: Timor Oriental. Un problema que parece preocupar sólo a los portugueses, la antigua metrópoli. Me entristece ver como los medios de comunicación, y por extensión los grandes partidos políticos, sólo se preocupan de estos conflictos cuando hay muertos.

Antecedentes


En el Sahara Occidental no había nada. España ocupó la región por lo que podíamos llamar prestigio internacional, con un pequeño destacamento tras la victoria de Prim en la que podríamos llamar Primera Guerra de Marruecos. Tras la pérdida de Cuba, Puerto Rico y Filipinas no quedaba Imperio Colonial. Las potencias europeas habían puesto sobre la mesa el reparto de África en la Conferencia de Berlín de 1888 y España ni estuvo ni contó en le reparto de África. Sólo pudo ocupar Sidi-Ifni y el Rif.

Con el banco pesquero y los fosfatos (nunca he sabido muy bien para qué sirven los fosfatos) como único atractivo, además del citado “prestigio internacional”, España permaneció en el Sahara más de lo debido. Tanto, que ni siquiera la independencia de Guinea Ecuatorial (1968) animó al régimen a descolonizar el Sahara. Y entonces vinieron los problemas.

El hábil Hassan II organizó la llamada “Marcha verde” y ocupó pacíficamente la región, algo que con la fuerza le hubiese costado muchas vidas. Con Franco agonizante, hablamos de los primeros días de noviembre de 1975, España admitió la política de hechos consumados y dejó tirado al pueblo saharauí, que por entonces lo conformaban unas 150.000 personas, según el censo realizado por el gobierno español. Con la opinión en contra del ejército, al que no sentó nada bien la retirada, España salió de nuevo derrotada ante Marruecos (otro día hablaremos de las guerras entre España y Marruecos y cómo la balanza cae claramente de parte de los marroquíes).

Algunos saharauis se organizaron militarmente en el Frente Polisario que empezó una guerra con Marruecos. Mauritania, a la que se había asignado en un tratado la parte sur del país, renunció rápidamente a sus “derechos”, un país tan pobre no se podía permitir una guerra. Argelia se puso desde el primer momento de parte del Polisario, les brindó bases en su territorio la actual Tinduf, y eso le sirvió a Marruecos de excusa ante Estados Unidos para evitar que el “peligro rojo” (el régimen argelino estaba apoyado por la Unión Soviética) obtuviera una salida al Atlántico.

Con mayor o menor intensidad el conflicto se extendió hasta 1991. En aquellos años (en los que yo estaba en la facultad), pensé que el conflicto se solucionaría. Iluso de mi, he de reconocer que China también se abriría cuando los estudiantes ocuparon Tian´anmen, como veis era todo un visionario. El caso es que se firmó la paz entre las partes con el auspicio de la ONU y se acordó que en febrero de 1992 se haría un referéndum de autodeterminación con el último censo español.

Desde entonces hasta ahora la diplomacia marroquí ha conseguido lo que quería. Seguir con la política de hechos consumados. Aplazar el referéndum sine die y continuar colonizando el Sahara Occidental con población marroquí, para que si en algún momento no queda más remedio que realizar el referéndum, tener la seguridad de que está ganado.

España ante el Sahara


Ante este negro panorama: ¿qué ha hecho España? Pues entre nada y nada de nada. Durante la etapa de Felipe González, la izquierda moralmente se sentía al lado de los Saharauis, pero todos sabemos la “debilidad” que el ex presidente siente por Marruecos, Con lo cual laissez faire laissez passer. La posición del PP en la etapa de Aznar siempre fue más beligerante con Marruecos, recordemos Perejil, pero defender al Polisario, esa pandilla de izquierdosos, era otra cosa. Y de Zapatero qué decir...

Hoy escuchaba a Gustavo de Arístegui, portavoz de la Comisión de Exteriores del PP en el Congreso, decir que España debe de adoptar una “neutralidad activa”. Solemne tontería. Juego de palabras a la altura de la diplomacia española. Me recordó mucho a la posición de “No beligerancia” del gobierno de Franco en la II Guerra Mundial. Me apena que este hombre, con una amplia experiencia como diplomático en el mundo árabe, diga esto ¿tendrá algo que ver su situación personal? su pareja es marroquí.


Siempre he pensado que la neutralidad no sirve de nada. En esta vida hay que significarse y de paso ponerse del lado de los que moralmente tienen razón. El Sahara nunca ha pertenecido a Marruecos. La mayor parte de los saharauis no quieren ser marroquíes. Pues salgamos a la calle y gritémoslo. Aunque sirva de poco, políticamente, al menos el pueblo saharaui no se sentirá solo.

Me apena saber que España no pinta nada en los organismos internacionales. Esta opinión, corroborada con amigos que trabajan en algunos de ellos y que merece un artículo aparte, viene a colación del Sahara. Nunca hemos presionado lo suficiente en Naciones Unidas para que se oiga nuestra voz. Ni en este problema, ni en ningún otro. Si nuestros soldados son suficientemente buenos para morir en Irak, en Afganistán, en el Líbano, en los Balcanes… nuestro gobierno debería tener la fuerza moral y diplomática suficiente para decir, basta. Hay que enviar inmediatamente una fuerza internacional al Sahara Occidental, liderada por nuestro país, y poner orden allí, como no supimos hacer en 1975. Desgraciadamente esto suena demasiado utópico.

3 comentarios:

  1. No viene a cuento, pero tienes que hacerte mirar eso de los fosfatos.

    Son un componente mineral muy interesante, inmensamente productivo y terriblemente peligroso en el largo plazo.

    Está presente en gran parte de las cosas que consumes, es un componente indispensable en los abonos artificiales, los aditivos de las carnes (hacen que retengan agua), hace que las salchichas no se desagan al freirlas (!), hace que la carne no tenga sabor ácido a los pocos días,se usan también en los detergentes....

    Lo malo es que al final todo acaba en las aguas de los rios, donde fomentan el crecimiento de las algas, que agotan el oxigeno y matan los ecosistemas... :-(

    Como nota curiosa, la minera BHP Billiton hizo una oferta este verano para adquirir PotashCorp por 40 Billones de dolares americanos....

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  2. Genial, Ruben!!! Veo que no solo te has lanzado a escribir, sino que ya es fácil acceder a tu blog!! Mi mas sincera enhorabuena por ello y porque realmente es muy interesante leer lo que escribes.
    Estoy de acuerdo contigo en que habría que salir a la calle para apoyar al pueblo saharui, pero como dices es utópico. Tan utópico como que salgamos a protestar por tantas cosas que estamos viviendo incluso nosotros directamente.
    Realmente es una pena, pero en este país solo protestan algunos y no siempre por cosas importantes.
    Espero que sigas escribiendo!!

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  3. Gracias por los ánimos Guayaba.
    En cuanto a Juan Fran, es un gusto contar entre mis lectores con un eminente ingeniero para aclararme el tema de los fosfatos. La cuestión saharaui no para de calentarse. Ahora el Polisario dice que está preparado para guerra. ¿esa es la solución? claramente no. Lo que hace falta es que España presione a la ONU para imponer la paz mediante un contingente "suficiente" de cascos azules y no los 215 observadores militares y policías desplegados actualmente en el Sahara. Pero como he dicho, del peso de España en las instituciones internacionales hablaré en otro post.
    Mientras tanto, nuestra ministra dice que necesita un informe oficial e imparcial. ¿pero es que España no cuenta con informadores en la zona? Si es así mejor nos ahorramos el sueldo de Félix Sanz Roldán (y el resto de funcionarios que trabajan con él) y damos de baja el Centro Nacional de Inteligencia. ¿Cómo puede ser que España no tenga desplegados en Marruecos una red competente de espías?
    Qué país, amigos, qué país

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